A los españoles nos cuesta renovar el coche, ¿por qué?, en el artículo de hoy trataré de contestar a esta pregunta. Y es que no es ninguna sorpresa que el parque automotor de España es uno de los más antiguos de Europa. Sin embargo, ¿por qué nos resulta tan difícil a los españoles desprendernos de nuestros «viejos coches» y optar por modelos más nuevos?. Existen estudios de mercado que han indagado sobre las principales disparidades entre el mercado español y el estadounidense, donde es poco común que un propietario mantenga un vehículo durante seis años seguidos.
Razones por las que a los españoles nos cuesta cambiar de coche
Como te decía, a los estadounidenses les cuenta menos desprenderse de su vehículo actual y adquirir uno nuevo, entre otras razones por las siguientes:
◼ La agresividad de los comerciales en Estados Unidos: en los concesionarios, los vendedores actúan con gran determinación, conscientes de que si un cliente se va sin comprar, es poco probable que regrese. Esto se debe a la ubicación de los concesionarios en las afueras de las ciudades. Por eso, los vendedores actúan enérgicamente para cerrar ventas, negociando intensamente hasta obtener el sí del comprador.
◼ Gran cantidad de coches disponibles en los concesionarios: además de lo anterior, cabe destacar el vasto inventario del que disponen. Dada la extensión de terreno de algunos de estos establecimientos —como el estado de Texas, que es tan grande como España—, algunos de ellos exhiben hasta quinientos automóviles. Esto facilita que, una vez concluida la transacción, el comprador pueda salir del concesionario conduciendo su nuevo vehículo.
◼ Facilidad para vender tu “vehículo viejo”: cuando un conductor desea vender su vehículo de ocasión, el proceso es bastante sencillo. Basta con llevar el coche a un concesionario y salir de allí con un cheque en la mano. Esto se debe a que los coches tienen asignado un número de identificación digital conocido como ‘VIN’, el cual contiene todos los detalles del vehículo, incluyendo su equipamiento.
◼ Seguro de responsabilidad del vehículo: en Estados Unidos, si un conductor tiene un seguro de responsabilidad civil a su nombre, puede usarlo para asegurar su nuevo coche durante el primer mes mientras se ocupan de gestionar un seguro específico para ese vehículo. Esta práctica es diferente de la de los compradores españoles, ya que estos tienden a centrarse en el precio del coche, mientras que los estadounidenses consideran más las mensualidades. La mentalidad de pago mensual está culturalmente bastante arraigada en Estados Unidos, tanto que las entidades financieras ofrecen financiación de manera rápida, a menudo sin necesidad de un análisis previo. Esto es porque es habitual que cada consumidor tenga un «scoring» que determina su capacidad para obtenerla. Este «scoring» es esencialmente un puntaje que sirve como referencia para evaluar la solvencia crediticia de una persona.
◼ Mentalidad: otra de las razones por la que en Estados Unidos la gente cambia de coche más a menudo, se debe en gran medida a su mentalidad aspiracional arraigada. Cuando su situación económica mejora, como por ejemplo con un aumento de sueldo, los estadounidenses tienden a optar por adquirir un vehículo de mayor calidad que el que poseen actualmente. En contraste, en España, la tendencia es más hacia amortizar el coche actual y saldar la deuda asociada lo antes posible para liberar recursos financieros dentro del presupuesto familiar.
La compra de un nuevo coche es un evento familiar: en Estados Unidos, comprar un automóvil sigue siendo un acontecimiento familiar importante. Esto se debe en parte a que se puede conducir a partir de los 16 años y a la relevancia que las largas distancias tienen en el estilo de vida del país. Esto hace que se vea favorecida la posesión de tu propio vehículo. Por ello, es bastante común ver que los colegios (institutos) estadounidenses disponen de amplios estacionamientos, cuyo mantenimiento está cubierto por las cuotas escolares.
Ya conoces algunas de las más destacadas razones por las que comparada con Estados Unidos, en España cuesta más renovar nuestro viejo coche. Y a ti, ¿te cuesta desprenderte más o menos que a los estadounidenses?