El invierno está cerca y el otoño ya está aquí, así que protege tu coche del frío. Si tu vehículo duerme a la intemperie, sufre con las temperaturas bajas, y sus elementos más vulnerables se deterioran con más facilidad. En este artículo te cuento una serie de consejos para proteger tu coche del frío en esta época de bajas temperaturas, ¡toma nota!
Consejos para que tu coche esté protegido del frío
Con la bajada de temperaturas, algunos de los elementos de tu coche se pueden desgastar más y, lo peor, puede provocar averías importantes. A continuación, te contaré cómo preparar tu vehículo para que le afecte menos el frío.
Trata de mantener el coche lo más cubierto posible
Tu vehículo se ve afectado por las bajas temperaturas y la solución más eficaz es mantenerlo resguardado. Lamentablemente, no siempre podemos contar con los recursos económicos para disponer de un garaje. Sin embargo, una alternativa a esto que busques lugares protegidos donde estacionarlo.
Otra opción efectiva para proteger tu automóvil de las inclemencias cuando tenga que permanecer en la calle es utilizar una lona. Esto evitará la congelación de las piezas y lo resguardará de las condiciones climáticas adversas. Esta también reduce el riesgo de robos, ya que disuade al delincuente al hacer menos atractivo el esfuerzo de retirarla.
Vigila el aceite
Arrancar el motor después de pasar la noche al aire libre puede resultar extremadamente difícil. Este esfuerzo adicional siempre tiene consecuencias negativas, por ello cualquier acción que puedas realizar para hacerlo más fácil será positivo para tu vehículo. La calidad y viscosidad del aceite de tu motor son factores críticos que pueden complicar el proceso de arranque. Si el aceite no es de alta calidad o se ve afectado por las condiciones climáticas, puede dificultar el arranque del automóvil. Por todo ello es fundamental que vigiles su estado y sigas las especificaciones del fabricante al elegir el tipo de aceite.
Protege los limpiaparabrisas de tu coche
Cuando las temperaturas descienden de forma considerable, existe el riesgo de que los limpiaparabrisas se queden adheridos al parabrisas de tu coche. Intentar forzar su movimiento o despegarlos cuando el cristal está helado los puede dañar. Por esta razón, cuando estaciones el vehículo, te recomiendo que los separes del parabrisas. Para ello puedes utilizar un corcho u otro elemento que impida el contacto directo con el cristal.
Es esencial que utilices un producto específico para climas fríos y reemplazar el que hayas venido usando. En caso de no contar con uno, puedes agregar una pequeña cantidad de anticongelante al líquido limpiaparabrisas.
No dejes que la batería se quede vacía
La batería de tu vehículo, además del motor y la carrocería, es uno de los componentes que se ven más afectados por el frío. Para asegurar un arranque suave y un rendimiento óptimo de esta, te recomiendo elevar ligeramente su temperatura unos minutos antes de intentar encender el motor. Esto se puede lograr utilizando un paño cálido y seco. Este pequeño gesto contribuirá a un encendido más rápido del vehículo y de este modo reducirá el desgaste general de sus componentes. También debes mantener los bornes de la batería limpios y libres de depósitos salinos para facilitar el contacto y la entrega de electricidad al sistema.
Comprueba que no se ha “congestionado”
El uso de un aceite de motor de buena calidad, ayuda a tu vehículo a arrancar sin realizar sobreesfuerzos. Otro elemento que es muy importante a la hora del arrancado con frío es asegurarte de que los filtros de combustible y los del aire estén en condiciones óptimas de uso, es decir, que no estén obstruidos. Con esto tu coche alcanzará de manera más rápida la temperatura adecuada para arrancar.
Utiliza anticongelante
El líquido refrigerante no solo cumple la función de enfriar el motor, sino que también actúa como anticongelante. Aun así, debes tener en cuenta que no todos los líquidos refrigerantes tienen la misma proporción de anticongelante. Te recomiendo que lo cambies cada 60.000 kilómetros o cada 3 años. Si tu coche se acerca a este punto, elige un líquido refrigerante de buena calidad para mantener el rendimiento óptimo de tu vehículo.
Este mantenimiento preventivo no solo aportará beneficios al motor, sino que también previene situaciones desagradables, como la congelación del líquido del sistema de refrigeración. En resumen, invertir en un buen líquido refrigerante ahora puede evitar problemas mayores en el futuro y tendrás la garantía de un rendimiento óptimo de tu vehículo.
Como ya has podido comprobar, el frío ya está aquí y ya sabes que la bajada de las temperaturas afecta de manera importante a tu vehículo. No siempre puedes mantenerlo bajo techo, pero si sigues estos consejos, las inclemencias del tiempo no incidirán de manera tan negativa en los elementos de tu coche.